Jacobo, acompañado por la Relaciones Públicas del hotel, abrió la puerta de lo que se suponía que iba a ser una sala de reuniones. Se sorprendió al ver que todo estaba a oscuras. Pero su sorpresa fue mayor cuando, de repente, se encendieron las luces y, una multitud le vitoreaba mientras sonaban los acordes de "Es un muchacho excelente"... A los pocos segundos, Maca se adelantó y, con cierto comedimiento, lo besó, tras lo cual, todos los asistentes prorrumpieron en "ohhhh"s y "qué bonito"s mientras regalaban a la pareja una estruendosa ovación.
Tras los besos, los saludos, los abrazos y las risas de rigor... las luces de la sala volvieron a apagarse. Esta vez era para proyectar un vídeo que recogía fotografías, vídeos y recuerdos de la pareja, de sus amigos, de sus viajes y de sus hijos... Las emotivas imágenes provocaron más de una lagrimilla en Jacobo... ante lo cual, Maca, extrañamente solícita, procedió a consolarlo con un abrazo, eso sí, con la mirada puesta en el expectante tendido, al que, con el arqueo de las cejas y ladeando levemente la cabeza, parecía pedir comprensión por la "debilidad" del homenajeado.
Finalizados el vídeo y las lágrimas, comenzó a sonar la música seleccionada por el DJ y los invitados, algunos con bastante ansia y ahínco, buscaron las cercanías del cortador de jamón. Música, comida y bebida, pelucas y fotos en el photo call... Más bebida... Efusivos reencuentros con los viejos amigos... La fiesta estaba empezando a ponerse divertida...
Fernando, en un patético intento de parecer casualmente encontradizo, se dirigió hasta donde estaban charlando animadamente Laura y Silvia. Fernando era buen tío, a pesar de ser abogado, pero tanto su físico como su conversación carecían de encanto e interés para el sexo contrario. Así que en cuanto Silvia vio venir el percal, sin el más mínimo disimulo, se alejó para buscar a Maca...
Fernando trató de entablar algo de conversación con Laura, preguntándole por su trabajo, por sus hijos, por su ausente marido... Laura, educadamente, respondía al insulso interrogatorio, mientras buscaba desesperadamente con la mirada a sus huidas y esquivas amigas... En no hallándolas, y habiendo sido estimuladas sus ganas de fumar por la trivial cháchara fernandina, cogió el bolso y le indicó que saldría al jardín a fumar. Para su desesperación, Fernando se ofreció a acompañarla...
El amplio jardín del hotel tenía unas mesas y sofás, en plan chill-out. Se sentaron y Laura rebuscó en el bolso un paquete de tabaco y un mechero. Encendió un cigarrillo aspirando con cierta ansia mientras Fernando la miraba embobadamente embelesado... Laura era consciente de que el triste Fernando sentía por ella cierta veneración. Aspiró otra calada y miró al cielo anaranjado de Madrid... Miró a Fernando... y le pidió que fuese adentro a por gin-tonic. Este obedeció, complaciente y diligentemente. Laura, sorbió un trago... y otro, entre calada y calada. Volvió a mirar a Fernando, esta vez inquisitivamente... ante lo cual, éste, con cierta vergüenza, bajó la cabeza. La última calada... el último trago. Se levantó, metió la cajetilla en el bolso y cuando parecía que iba a hacer lo mismo con el mechero, lo dejó caer, intencionadamente, al suelo. Fernando se arrodilló para recogerlo, momento en el que Laura, con voz pausada pero enérgica, le ordenó:
- Lámeme el pie...
¡Cuánto has tardado, Manolo! Ya no recordaba de dónde arrancaba la historia.
ResponderEliminarSe me ocurre que las mosquitas muertas que se atreven con los pusilánimes deberían quedar sorprendidas y escarmentadas, por ejemplo, con un apasionado y burraco repertorio de contorsión sexual que le borrase de la cara la sonrisa operada de niña bien de Puerta de Hierro.
Hummm, supongo que no harás eso por Fernando y por Laura, ¿no? ¿o sí?
Besazo!
No sé... no sé...
EliminarMe da a mi que Laura, a pesar de parecer menos "activa" que Maca y Silvia, al final va a resultar ser mujer de armas tomar... y de castigos aplicar ;-)
Ya, ya... pero aprovecharse del pobre Fernando...
EliminarDebería llevarse ella la sorpresa jeje
Podría ser, podría ser...
Eliminar¿Te imaginas?
Salen de la fiesta... y aprovechando la ausencia de su marido, se lleva a su sumiso a un hotel. Una vez allí, y nada más franquear la puerta de la habitación, Fernando, con una erección equina, la arroja sobre la cama... y le dice, mientras se baja el pantalón:
- Ahora me vas a lamer la polla...
Mmm... podría quedar bien, ¿verdad?
De fábula, podría quedar... bien empachada jajajajaja
ResponderEliminarYa veremos qué sucede en realidad.
¡Buena noche de saturday, Manolo!
Igualmente, Lou... y muchas gracias por tus sugerencias... y tu visita.
EliminarMe gusta la historia. Da la impresión de que la fiesta promete mucha acción. Buen giro en el último instante.
ResponderEliminar:)
Gracias, Tatu, por la visita y el comentario...
EliminarEn nuestro entorno surgen muchas relaciones y vínculos que con el más mínimo estímulo o con un breve chispazo dan lugar a incendios de insospechadas consecuencias...
Sólo hay que querer arder...
Muy bueno ese final, inesperado e intrigante en cuanto a saber, qué y cómo sucederá, lo que se presagia sucederá…
ResponderEliminarMe encanta sentirme atrapada entre tus letras…y sentir el “quiero más…”
Un placer y mil Bsoss!
Me alegra que te haya gustado, Ginebra.
EliminarSin que sepamos muy bien la causa u origen, a veces se dan las circunstancias propicias para que se desencadenen acontecimientos que pueden cambiar para siempre nuestros límites, nuestras líneas rojas.
Y seguro que Laura pondrá a prueba los límites de la obediencia del sumiso Fernando...
Manolo, cuando tardas tanto en volver a escribir es que me pierdo y tengo que volver a situarme pero menos mal que para eso estás tú que nos sitúas y nos pones en su sitio acercándonos la otra entrada, y es que hacía tiempo no venía por aquí, pero en cuanto veo que publicas intento venir cuanto antes a descubrir más relatos tuyos de los eróticos que nos tienes acostumbrados y también saber que sigue la historia pero no nos pierdas otra vez ¿eh? jajaja.
ResponderEliminarUn placer estar aquí y empaparme de tus letras. Ah, y también de las imágenes, voy a ver si has puesto alguna nueva.
Un beso grande.
Sí... tardo mucho en escribir: meses entre entrada y entrada... Quizás se debe a que últimamente tengo una vida tranquila, sosegada... y con pocas novedades, jaja.
EliminarPor el momento, este relato no está resultando demasiado "erótico"... Pero claro... se trata aún del principio de una fiesta... Quizás haya que esperar a que los Gin-Tonics hagan su efecto, jeje.
Y como siempre, gracias, María, por pasarte por este no muy erótico, aunque sí festivo, blog....
Un "me gusta"..... logra mover lo q intento aquietar...llevó un tiempo sintiendo tu regreso....telepatía? O nos une un hilo rojo?
ResponderEliminarLlevó un tiempo pensando en una canica roja ...sera la tentacion de lo prohibido? Será que esto es infinito?
El príncipe de las palabras, q bonito escribes y como adoro leerte entre líneas...en tus historias ando vagando descalza, en silencio y leo q concedes deseos Asi que antes de convertirte en polvo de estrellas....(es un deseo tonto, infantil y desaprobechado...puestos a pedir) pero soy sencilla ( no me gusta lo complicado) y solo .
deseo ." tus palabras"...con ellas volé un tiempo...llegue a la luna....quiero volver a sentirme viva...me hago mayor, ....y Aruba esta en mi corazón.
Llevame a la plaza de la alegría, como furtivos....asumo q jamás habrá piel....el guión así lo requiere, pero en las palabras podemos volar libres (de pecado}.....buscarme con otro avatar y vuelve a pintarme con tu pluma...mi viejo corazon!
Un placer volver a leerte.
Cuando el mar te tenga...
EliminarUn placer que te hayas cruzado en mi camino hoy bellas tus letras
ResponderEliminarGracias, Recomenzar, por tu visita y amables palabras...
EliminarTe sego leyendo Avisame cuando vuelvas a escribir Ando perdida en esto
ResponderEliminarWoaw sigues manteniendo tu pasión ;)
ResponderEliminarEs más sencillo mantener la pasión cuando hay alguien especial con quien compartirla ;-)
ResponderEliminar(Gracias, Niña Mala, por volver a pasarte por aquí. Me alegro de volver a saber de ti)